anillo engastado con un huecograbado sobre granate que representa el busto de un joven sátiro, de perfil c. la izquierda, la espalda de tres cuartos y cubierta con una piel de animal.
El personaje báquico se caracteriza por una nariz prominente y una boca entreabierta, inspirados en modelos del arte griego helenístico. El cabello compuesto por largos mechones ondulados también recuerda la iconografía helenística de los sátiros.
La expresión facial es vivaz, acentuada por cejas fruncidas, ojos muy abiertos y una boca casi en movimiento.
La mano derecha posicionada hacia arriba frente a la cara, con el dedo índice levantado. Este gesto remite al del silencio, presente en ciertas gemas desde la Antigüedad hasta el período neoclásico y que remite al simbolismo del Secreto.
Sin embargo, aquí se debe considerar otro grado de interpretación. La mano apartada de la boca y la expresión casi molesta del sátiro pueden evocar una advertencia o una incitación a la ascensión.
En efecto, el sátiro representa el mundo báquico, el de los placeres carnales terrestres y los bajos instintos. Es por lo tanto un símbolo del Ser salvaje, animal. El color rojo ámbar de la piedra también hace referencia al mundo erótico y sanguinario.
Sin embargo, este gesto viene a contrarrestar la impresión que desprende este personaje, al invitar al espectador a una ascensión espiritual o intelectual.
Un gesto similar está presente en un camafeo sobre ágata que representa el busto de una musa (interpretada como Philosophia en referencia a la meditación y la ascensión espiritual), Florencia, Museo degli Argenti, Collezione Medici, inv. Joya de 1921, n°28.
El reverso de la piedra está tallado en punta. Presencia de signos de desgaste. Los detalles están ejecutados con gran maestría.
TDD 57/58 (US 8); 11 gramos; 15x17x5mm
Marco de finales del siglo XIX - principios del siglo XX
Huecograbado: siglo XVI-XVII
Procedencia
Colección privada francesa, formada en los años 1980-1990
Un anillo de oro de finales del siglo XIX y principios del siglo XX engastado con un grabado granate renacentista que representa el busto de un joven mirando hacia la izquierda y pidiendo silencio. Siglo XVI-XVII d.C.
El personaje báquico se caracteriza por una nariz prominente y una boca entreabierta, inspirados en modelos del arte griego helenístico. El cabello compuesto por largos mechones ondulados también recuerda la iconografía helenística de los sátiros.
La expresión facial es vivaz, acentuada por cejas fruncidas, ojos muy abiertos y una boca casi en movimiento.
La mano derecha posicionada hacia arriba frente a la cara, con el dedo índice levantado. Este gesto remite al del silencio, presente en gemas desde la Antigüedad hasta el período neoclásico y que remite al simbolismo del Secreto.
Sin embargo, aquí se debe considerar otro grado de interpretación. La mano apartada de la boca y la expresión casi molesta del sátiro pueden evocar una advertencia o una incitación a la ascensión.
En efecto, el sátiro representa el mundo báquico, el de los placeres carnales terrestres y los bajos instintos. Es por lo tanto un símbolo del Ser salvaje, animal. El color rojo ámbar de la piedra también hace referencia al mundo erótico y sanguinario.
Sin embargo, este gesto viene a contrarrestar la impresión que desprende este personaje, al invitar al espectador a una ascensión espiritual o intelectual.
Un gesto similar está presente en un camafeo sobre ágata que representa el busto de una musa (interpretada como Philosophia en referencia a la meditación y la ascensión espiritual), Florencia, Museo degli Argenti, Collezione Medici, inv. Gema de 1921, nº 28.
El reverso de la piedra está tallado en punta. Presencia de signos de desgaste. Los detalles están ejecutados con gran maestría.
Descripción completa